Relaciones fugaces

Marcel Proust pensaba ―según afirma Jacques Bouveresse― que la literatura es un modo de conocimiento de la realidad de las cosas que más nos importan, tan profundo como la metafísica, y que está al alcance de todo el mundo. Este pensamiento se puede evidenciar al leer a Cristina Peri Rossi, una escritora que, en gran parte de su obra, indaga en aspectos íntimos de la condición humana y en las relaciones de pareja con sus fantasías y sus prejuicios, sus ambiciones y frustraciones. Menoscuarto publica una colección de once relatos de la autora uruguaya bajo el título Los amores equivocados que toma de uno de sus cuentos.
Son historias de amor y sexo que no suelen durar mucho tiempo y en las que determinados sucesos inesperados actúan como puntos de inflexión en la vida de los protagonistas obligándoles a replantear sus sentimientos y hasta sus deseos. Un camionero recoge a una adolescente que podría tener la edad de una de sus hijas y se crea en él un conflicto interior entre los dictados morales y los de su instinto. La protagonista de otro de los cuentos realiza un largo viaje —igual que hiciera la Maga de Cortázar— para buscar a su amado por el que sería capaz de hacer cualquier cosa; un acto de amor que él no se siente capaz de igualar ni compensar. En estos relatos, la mujer soñada durante toda la vida se encuentra a la vuelta de la esquina, una alumna consigue manipular a su profesora y amante y un simple pelo del pubis de una mujer es capaz de poner en un apuro a un hombre cuando se le queda pegado a la garganta. La vida da un giro imprevisible una noche lluviosa en la que una mujer, que atraviesa la ciudad al encuentro de su amante, se detiene para que suba una joven que hace autostop; o para una mujer que siente el engaño en el que ha hecho vivir a su pareja cuando, en la madurez, descubre su verdadera sexualidad y es capaz de hacer realidad sus fantasías eróticas. Un diálogo puede ser revelador, como el que mantiene un psiquiatra que autoanaliza su precaria relación de pareja mientras escucha a su paciente que, a través de innumerables fotografías, trata de evitar el olvido del rostro de la mujer que abandonó; o el que mantiene una periodista con un escritor que huye de la realidad y con el que desea acostarse.
Los personajes de Peri Rossi suelen ser algo oscuros, con un lastre que arrastran de su pasado: hijos abandonados, infancias y adolescencias robadas por la crisis, frustraciones, deseos insatisfechos, obsesiones reprimidas. Los ambientes urbanos en los que suceden estas historias remarcan la soledad de los personajes que viven en muchos casos la desazón de haber malgastado su vida y sintiendo la incomprensión de deseos que pocos están dispuestos a confesar. Muchos de estos relatos rebosan sensualidad, erotismo y hablan del sexo de una forma explícita, sin ambages, pero con lirismo. Cristina Peri Rossi, utiliza la literatura ―esa forma de conocimiento― para indagar en las pulsiones, en los mecanismos del deseo que mueven al ser humano.









Los amores equivocados
Cristina Peri Rossi
.
Editorial Menoscuarto, 2015.

Curanderos y videntes

Guardo algunos libros de mi abuelo, publicados a principios del siglo XX, en los que el profesor H. Durville trataba de explicar de forma científica las técnicas de curación de dolencias físicas y morales mediante la aplicación de lo que llamaba física dinámica, basada en el magnetismo personal y el hipnotismo. Leyendo las historias que recoge Manuel Moyano en su Dietario Mágico descubro que muchas de esas técnicas siguen vigentes y las practican algunos curanderos que dicen estar poseídos de un don o una gracia especial. Moyano recorrió durante dos meses la Región de Murcia y se entrevistó con curanderos, zahoríes, videntes e iluminados. La forma que tienen de conocer sus capacidades bienhechoras es muy diversa. Un curandero no descubrió que lo era hasta pasados los setenta años y un zahorí se percató de su condición al notar un extraño malestar durante una siesta campestre. Otro, en cambio, desde los seis años tiene visiones de la Inmaculada Concepción. En la mayoría de los casos, parece que hay una predisposición genética, heredándose la gracia con el salto de una generación, por lo que son los abuelos los encargados de aleccionar a los nietos dotados de este don.
Moyano, nos presenta unas historias entrañables de personajes reales con un lenguaje directo, desenfadado, manteniendo cierta distancia en un equilibrio entre el respeto y la ironía.










Dietario Mágico
Manuel Moyano

La Fea Burguesía Ediciones, 2015.
Publicado en Cuadernos del Sur el 5 de diciembre de 2015

Tambor de arranque, de Francisco Bitar.

Esta novela breve, publicada por la editorial Candaya, trata de las ilusiones y esperanzas rotas ante una realidad de fracaso y frustración contenida. Leo ―un perseguidor de sueños, idealista e inseguro― e Isa ―una mujer con un sentido práctico de la vida y algo recelosa― viven los últimos momentos de una relación minada por la decepción de los acontecimientos del día a día y los propósitos que les son negados. Quieren plantar un árbol para dar sombra delante de su casa, pero una vecina se lo impide; quieren comprarse un auto de segunda mano con los ahorros destinados a una nueva cama y la operación no les sale bien. Eso es lo último que intentarán hacer juntos. Y en medio de esa desilusión está su hija Sofía, una víctima silenciosa de los problemas de comunicación y el alejamiento que sufren sus padres.
De forma paralela a las dificultades de los protagonistas, que atraviesan momentos de profunda soledad, se advierten otros problemas de calado social, como la ausencia de un futuro alentador, el abandono de los barrios periféricos, la dependencia de las efímeras cosas materiales o la persistente crisis. La falta de solvencia económica, a pesar de ser ambos profesores, les obliga a vivir en condiciones muy austeras. La inconsciencia de Leo, sus decisiones equivocadas, acaban con la paciencia de Isa. Ella se encierra con su hija en el mundo que le ha costado construir y al que no quiere renunciar. Él va perdiendo lo poco que le queda por el camino; su pasado repleto de anhelos se va desmoronando pieza a pieza, casi sin darse cuenta, hasta que comprende que la reconstrucción resulta imposible, que su vida, irremediablemente, ha naufragado sin quedarle ya ningún asidero al que agarrarse. 
Francisco Bitar es un autor argentino que escribe con el estilo limpio, directo y aparentemente sencillo que nos mostró Hemingway en sus cuentos y que luego desarrollaron con maestría Salinger y Carver entre otros. Esta influencia del cuento estadounidense se aprecia también en la desolación que transmiten los paisajes de suburbios urbanos en los que se mueven los personajes, con parajes desolados y casas que dejan de ser hogar. Nos muestra los hechos, las acciones y, a través de los gestos, de las situaciones, nos descubre los mecanismos que llevan a los personajes a actuar de una forma determinada. En esa simplicidad intensa hay un permanente trasfondo melancólico que se percibe en la falta de comunicación entre los personajes, en el amor mermado por los desengaños, en el deseo roto, en los reproches, la incomprensión y las falsas expectativas. Bitar es un gran observador de la condición humana, dibuja con trazos sutiles la angustia y la inseguridad de los protagonistas, pero no entra a valorar su conducta, solo la muestra para que sea el lector quien saque sus propias conclusiones.










Tambor de arranque
Francisco Bitar
Editorial Candaya, 2015